En la mitología, el desnudo fue
utilizado por los artistas para exaltar la belleza de los personajes
representados, costumbre que no fue asumida por las religiones posteriores (Escultura de Pradier).
Imagen de la Virgen de la Cabeza,
tal y como se muestra actualmente en su Santuario de Sierra Morena (Andalucía).
En la naturaleza, los animales
están desnudos, y la ocultación del cuerpo es un fenómeno que tiene una
finalidad defensiva. El hombre descubrió el vestido para protegerse de las adversidades,
y paralelamente a la evolución de su cerebro apareció el pudor, un sentimiento
que le impide mostrar su desnudez a otros hombres –en el Génesis, el pudor es
inmediato al conocimiento–. Quizá sea
esta la razón por la cual los católicos han estado obsesionados con “vestir”
las figuras de la Virgen, llegando a cubrir imágenes de extraordinaria belleza
y gran valor artístico.
La Virgen de la Cabeza, de cuya
veneración se tiene conocimiento desde el siglo XIII, ha llegado a ser una de
las romerías más populares de España y, probablemente, la más antigua de todas.
Actualmente, la imagen de esta Virgen aparece cubierta por sallas, manto,
rostrillo y corona que ocultan la verdadera imagen, una obra de arte del
escultor José Navas Parejo.
Cuando la imagen de la Virgen de
la Cabeza es desnudada de ropajes y abalorios se contempla su verdadera gracia,
sencillez y belleza (Obra del escultor
Miguel Peinado Blanco).
Texto y figuras de José Del Moral De la Vega
Hola, José:
ResponderEliminarMuy bella la imagen de la Virgen mostrada en su verdadera magnitud, la iglesia católica tiene cosas que actualmente rayan en la mojigatería y desdibujan la verdadera fe.
Un abrazo.
Tienes razón, Rafael. La iglesia católica confunde muchas cosas y los católicos debemos decírselo.
ResponderEliminarUn abrazo