Recuerdo de un paseo
por la Alcazaba de Badajoz,
en primavera,
con Flory, Saray, Jerónimo y Diego
“Esta noche, la imagen de tus besos en el sueño que siempre me acompaña, me ha dejado impregnado de azahar, y ahora, bien despierto, al evocar el sueño, no sé qué es más real, si tus besos o el olor que siento…”
El visitante se acercó al lugar de donde creyó que venía aquella voz; pero allí no había nadie: la muralla de la Alcazaba, la torre albarrana, las palmeras, los naranjos, el viento…y nada más. Se quedó muy quieto, y de nuevo volvió a oír la voz.
El visitante sacó su libreta y escribió: en Badajoz, por primavera, el aire de la Alcazaba está perfumado de azahar, y al cerrar los ojos se oyen voces, y no hay duda de que son de enamorados.
Del libro “El amor y los naranjos”
Texto e imagen de José Del Moral De la Vega
Querido José,
ResponderEliminar¡Qué bello relato! No cabe duda que la primavera refresca las almas y las impregna de los más tiernos sentimientos.
Y la edificación que nos muestra tu fotografía no se queda atrás. Parece un lugar mágico, donde los sueños se pueden realizar.
Gracias José.
Un beso.
Bello y evocador post, José.
ResponderEliminarQué hermosos son los días en los que el aire lleva "la esencia sutil de azahar". Además de la poesía, otros saberes nos hablan de las propiedades de la esencia de azahar, leo que es un afrodisíaco y parece se que provoca sueños que liberan las tensiones emocionales del inconsciente.
Vayamos a pasear más a menudo entre naranjos en flor.
No lo dudes, Angélica, este lugar de Badajoz que os he traido es mágico. Si tú lo visitaras, con la sensibilidad que tienes para el amor, seguro que que nos regalarías poemas bellísimos.
ResponderEliminarMuchas gracias por tu visita.
Un abrazo
Efectivamente, Matilde. Hay cosas que no las valoramos suficientemente -hasta que las perdemos-; y pasear en un ambiente impregnado de azahar es un regalo mucho más valioso que muchas de las baratijas que nos empeñamos en adquirir.
ResponderEliminarMuchas gracias por tu visita.
Un abrazo
Precioso relato embriagado de Azahar y de sueños al lado de nuestra "Gran Dama"
ResponderEliminarSeguro que tú has entrado en ese paraiso. Muchas gracias por tu visita
ResponderEliminary tus palabras, Luz.
Un abrazo
José: Que bonito texto, realmente has estado inspirado.
ResponderEliminarMe gusto muchísimo amigo!
Muchas gracias, Carla.
ResponderEliminarUn abrazo