La poda, una operación profiláctica importante contra las enfermedades de los frutales.



Sarmiento de vid con síntomas
de Necrosis bacteriana (Xylophilus ampellinus)

Los frutales pueden sufrir enfermedades desencadenadas por patógenos que se instalan en la madera del tronco o ramas más o menos gruesas.
En los frutales de pepita (peral, manzano…) es frecuente la Necrosis bacteriana (Pseudomonas syringae pv. syringae ), el Moteado (Venturia spp); en los frutales de hueso ( melocotonero, ciruelo…) es muy corriente y causa grandes pérdidas el Chancro de las ramas (Phomopsis amygdali); y en la vid, provocan considerables pérdidas económicas la Eutipiosis (Eutipa lata), la Necrosis bacteriana de la vid (Xylophilus ampellinus)…Estos patógenos se refugian, prioritariamente, en el tronco y ramas de los frutales, y suelen identificarse por la aparición de cicatrices o chancros en los mismos.
La poda es una técnica eficaz para rejuvenecer los árboles y orientar la producción; pero es un medio potentísimo para extender los patógenos, por ello es aconsejable, al realizarla, seguir la siguiente profilaxis :
Antes de comenzar la poda inspeccionar la plantación, comprobar la existencia de síntomas y señalar su presencia con indicadores bien visibles. (Esto es recomendable hacerlo en verano, con los síntomas muy visibles)
Es recomendable podar con tiempo seco, y empezar por los árboles sanos.
Algunos autores recomiendan tratar la plantación con un compuesto cúprico antes de podar, para que al cortar, el cobre que impregna la madera proteja la herida.
Al pasar de un árbol a otro, mojar en alcohol del 70% el elemento de corte de la tijera.
Realizada toda la poda, los árboles muy afectados deben ser arrancados.
La madera cortada debe ser cuidadosamente retirada de la plantación y quemada.
No todos los patógenos son sensibles a los mismos terapéuticos, y tampoco todos los tratamientos después de la poda son eficaces, aunque, como profilaxis, es muy recomendable mojar los cortes grandes de poda con un compuesto cúprico mediante brocha.

(Para más información consultar el libro "La Sanidad de los Vegetales Cultivados")


Fig. y texto de José Del Moral De la Vega

Comentarios